martes, 7 de julio de 2015

ALINEARSE



Las palabras también se ponen de moda. Hoy día (año 2015) escuchamos por todas partes “alinear”. Los jóvenes se alinean con los profesores y éstos con los trabajadores; la cámara se alinea con el gobierno; varios partidos políticos se alinean frente a un proyecto de ley; se alinean los jugadores en la cancha; otros alinean su auto, etc.  

El diccionario define el verbo alinear como “Colocar en línea recta varias personas o cosas; Incluir a un jugador en el equipo que ha de participar en un partido o en una competición; Vincular o asociar a una persona a una tendencia ideológica, política o de otro tipo”. Pero dependerá del contexto en el cual se la utilice, la palabra alineación referirá diferentes cuestiones. 

Cuando se refiere a la colocación en línea recta, no puedo dejar de recordar aquella vieja costumbre escolar de formarse en dos filas antes de entrar a la sala de clases, ordenamiento al parecer en desuso, en tiempos en que se valora más la toma de decisiones personales, la libertad individual y la democracia. 

En el ámbito deportivo designa la formación de un equipo. Los jugadores que salen a la cancha -arquero, defensa, mediocampo, delanteros- se ordenan de acuerdo a lo indicado por el entrenador. La televisión presenta en pantalla una placa con la alineación de partida del equipo. Los espectadores muchas veces lamentan la ausencia de su jugador favorito en la alineación del equipo. Acaso usted vivió esta experiencia en el último campeonato. 

En política suelen alinearse personas y partidos de corrientes muy distintas, frente a un asunto polémico como el aborto, las parejas homosexuales, la eutanasia, cambios de leyes, etc. aunque no tengan las mismas ideas políticas. 

Cuando se trata de la informática, más precisamente en lo que se refiere a la escritura de textos en el computador, el concepto de alineación es ampliamente utilizado para referir el posicionamiento de las líneas de un texto o párrafo, según varias posibilidades: derecha, izquierda, centrado y justificado. 

En definitiva la idea de alinearse es establecer un orden, unirse para lograr algo ordenado, estar la mayor cantidad de personas agrupadas en una sola línea. El concepto de alineación no es nuevo. Ya en la Antigüedad, en la época de los hebreos, se hablaba o escribía, al hacer sus genealogías, de líneas de parentesco, como se puede leer en el primer libro de la Biblia: “Y estos son los hijos de Reuel, hijo de Esaú: los jefes Nahat, Zera, Sama y Miza; estos son los jefes de la línea de Reuel en la tierra de Edom; estos hijos vienen de Basemat mujer de Esaú.” (Génesis 36:17) Lo mismo cuando se dice: “De los hijos de Secanías y de los hijos de Paros, Zacarías, y con él, en la línea de varones, ciento cincuenta.” (Esdras 8:3 

La palabra alinear no aparece en la Escritura pero sí se habla de línea de batalla. En estrategia militar es la disposición que afecta a las tropas de las diversas armas del ejército sobre el terreno, para que se presten apoyo mutuo y protección. Es un orden para la batalla, con el propósito de alcanzar victoria. Así un profeta escribe: “Y aconteció que cuando el filisteo se levantó y echó a andar para ir al encuentro de David, David se dio prisa, y corrió a la línea de batalla contra el filisteo.” (1 Samuel 17:48) 

Una línea, en realidad es una alineación de letras, palabras y frases: “La palabra, pues, de Jehová les será mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá; hasta que vayan y caigan de espaldas, y sean quebrantados, enlazados y presos.” (Isaías 28:13) 

En lo espiritual, con miras a la salvación de nuestras almas, todo ser humano necesita alinearse con Dios y para lograrlo debe hacerlo primero con Su Hijo Jesucristo. Si alinearse es tomar nuestra posición para estar en el orden que Dios quiere, entonces necesitamos reconocer nuestras faltas y pedir perdón a Él. La sangre de Jesús limpiará nuestras conciencias de pecado y así podremos entrar al Reino de Dios como hijos de Dios. Dentro del Reino nuevamente nos alinearemos, ocupando la posición que el Señor nos indique. Vivir alineados con Dios es conocer Su Palabra y obedecerla. ¿Está usted alineado con Dios?